Semana Santa 2013: Montaje del Trono

El Lunes Santo es quizás el día más ajetreado de toda la Semana Santa para todo colaborador de la Hermandad.

Este año, durante la mañana, se estuvo preparando todo para proceder a montar el trono por la tarde. Fue necesario proceder el traslado de las imágenes secundarias del paso a la Iglesia de San Francisco. Asimismo hubo que trasladar todo el ajuar de las tres imágenes así como diverso material de carpintería, limpieza, costura, etc.

 

 

Ya en la jornada de tarde y recién acabados de almorzar quedamos para proceder al traslado de nuestro trono a la Iglesia de San Francisco. Aunque este traslado se hace en camión es necesario contar con un gran número de hermanos para proceder tanto a montar las andas en el camión como la posterior bajada de las mismas y su ubicación en el lugar correspondiente dentro de la iglesia. Como viene siendo habitual este año la afluencia de hermanos costaleros que acudieron a estos menesteres fue muy numerosa y el traslado fue más cómodo de lo esperado.

 

Una vez que el trono ya estuvo ubicado a lado del Camarín de nuestra Cofradía procedimos a montarlo. El montaje conlleva muchísimas actividades que fueron coordinadas convenientemente.

 

 

Por un lado es necesario que unos pocos realicen la limpieza del trono, varales, faroles, campana, etc. Por otro lado otro grupo de personas se dedicó a colocar convenientemente los faroles y a fijarlos. Otros estuvieron poniendo las almohadillas y los tacos de los costaleros. Por último, otro grupo estuvo montando las imágenes en el trono y procediendo a vestirlas bajo la atenta supervisión de nuestra camarera Gloria Torres.

 

La tarde se fue convirtiendo en noche y poco a poco el trono fue tomando forma. En esta ocasión, el soldado romano portaba su capa de terciopelo azul. Pilatos ha ido vestido con la toga de Senador portando la Sentencia que ya estrenamos hace unos años. La imagen de Jesús de la Ventana ha ido igualmente con corona y caña naturales como lo lleva haciendo desde 2.011. El mantolín también ha ido como en los últimos años pudiéndose percibir perfectamente la maravillosa talla de la espalda de nuestro Cristo.

 

 

A pesar de los años no deja de ser una experiencia maravillosa el poder asistir cada Lunes Santo al montaje del trono y poder estar lo más cerca posible de nuestro Señor, Jesús de la Ventana.